
Consejos para lavar la bata de rizo
Esta bata corta de rizo, tan acogedora y amorosa, no requiere cuidados especiales ni difíciles. Para mantenerla esponjosa y como nueva basta lavarla al revés en la lavadora, con un programa de lana o para prendas delicadas, con la dosis adecuada de jabón y suavizante. Una vez escurrida, os recomiendo colgarla al derecho en una percha para dejarla secar. No se debe planchar pero sí conviene pasarle suavemente un cepillo en la dirección del pelo para que recupere su textura.
En un artículo anterior ya os conté cómo cuidar los camisones para que mantengan su brillo y frescura. Os vuelvo a recordar aquí los cuidados básicos:
1.- Aunque puedes meterlos en la lavadora, te recomendamos que los laves a mano.
2.- Llena el recipiente que vayas a usar, el lavabo, fregadero, una palangana …, con agua tibia y la dosis adecuada de jabón para prendas delicadas. Procura que el jabón esté bien disuelto ante de sumergir la prenda.
3.- Frota ligeramente la zona donde haya manchas. Si no las hay, será suficiente con hacerlo girar en el agua y frotarlo con las manos suavemente (haciendo el gesto de apretar con ambas manos).
4.- Tras el primer lavado, vacía el agua utilizada y vuelve a llenar el recipiente con agua tibia y limpia, y empieza el aclarado.
5.- Cambia el agua las veces necesarias, hasta que veas que la prenda ya no suelta jabón.
6.- Es muy aconsejable hacer un último aclarado con un producto suavizante, dejando la prenda sumergida en el agua unos minutos.
7.- Escurre el exceso de agua de la prenda por presión con las manos pero sin retorcer.
8.- Tiéndela donde tengas costumbre de tender tu ropa, o mejor en una percha ya que casi no necesitará plancha.
9.- Una vez seca, retírala y prepárate para el planchado.
10.- Siempre es aconsejable mirar la etiqueta de composición del tejido de la prenda, allí encontrarás indicada la temperatura a la que deberás utilizar la plancha. En este caso, recomendamos que los se planchen por el revés, con el mínimo de calor y de vapor que permita la plancha (nunca superando los 30º).
¡Sigue estas indicaciones y disfruta de tus prendas siempre como nuevas!